Trabajando con un equipo en un país diferente
El mundo está conectado más que nunca en estos días. Las ideas, las personas y los bienes fluyen libremente (en su mayor parte) en todo el mundo. La globalización y la tecnología no solo nos han permitido comunicarnos con personas del otro lado del mundo, sino que han hecho de esta conexión instantánea sea algo común. A medida que las empresas se expanden a diferentes países y continentes, los equipos internacionales son cada vez más comunes.
Los desafíos
Trabajar con un equipo en un país diferente puede sonar desalentador, y ciertamente existen obstáculos que pueden afectar la productividad y crean nuevos desafíos. Por ejemplo, trabajar en diferentes zonas horarias puede dificultar que el equipo esté en la misma página sobre un proyecto. Las decisiones tomadas en una zona horaria podrían llevar un proyecto en una dirección completamente nueva para cuando el resto del equipo se ponga a trabajar. Además, puede sentirse solo, especialmente si la mayoría de su equipo trabaja desde una oficina diferente. La proximidad es uno de los factores clave en la construcción de relaciones con sus colegas. Si el único tiempo que puede pasar con su equipo es durante las llamadas de Skype, puede ser difícil sentirse socialmente cerca de las personas con las que trabaja todos los días.
¿Cómo superarlos?
En mi tiempo con EF Academy, aprendí una cosa clave que realmente ayuda a que trabajar con un equipo en un país diferente sea agradable y sin problemas. Es tan simple como esto: ¡siempre comunícate! Es posible que solo haya unas pocas horas cada día en que esté en la oficina al mismo tiempo que tus compañeros de trabajo del otro lado del mundo. Este es el momento de aprovechar esa pequeña ventana de tiempo y hablar con los miembros de tu equipo lo más que se pueda. Programa llamadas regulares para dar actualizaciones sobre proyectos, intercambia ideas con tus compañeros de equipo y consulta con tus supervisores. Esto no solo mantendrá a todos informados sobre lo que está sucediendo, sino que también ayudará a construir relaciones más cercanas con tus compañeros de trabajo.
Los beneficios
Ser parte de un equipo internacional puede ser difícil a veces, pero la recompensa, tanto personal como profesional, vale la pena. Trabajar con personas de una variedad de entornos sociales y culturales es una excelente manera de aprender y pensar de manera crítica. Mantener tu mente activa al comprometerte con nuevas perspectivas junto con tus compañeros de trabajo tendrá un impacto positivo tanto en tu trabajo como en tu desarrollo personal. Adoptar la diversidad y abrir tu mente a diferentes enfoques te enseñará a resolver problemas de manera más creativa— una habilidad que te beneficiará sin importar dónde trabajes.
No solo aprenderás de tu equipo internacional, sino que también ampliarás tu red social. La colaboración con personas de diversos orígenes tiene el potencial de abrir otras puertas profesionales en el futuro que pueden llevarte a un nuevo campo o país. Estoy muy agradecida por todo lo que he aprendido de mi equipo y por las conexiones que he hecho en todo el mundo durante mi tiempo aquí en EF Academy. Si eres tan afortunado como yo, tu equipo se convertirá en amigos cercanos que esperarás ver cada vez que viajes. (Otra ventaja adicional de trabajar con un equipo transcontinental: ¡viajar!) Tener amigos, compañeros de trabajo y conexiones en todo el mundo, como saben los ex-alumnos de EF Academy, es algo increíble.