Sleepless in Seattle, 24 horas en la Ciudad Esmeralda
La mayoría de la gente conoce la capital del estado de Washington por Starbucks, la serie de televisión Anatomía de Grey y la comedia romántica Sleepless in Seattle_._ Sin embargo, la ciudad del noroeste del Pacífico tiene mucho más que ofrecer que dramas de pareja y café, Seattle es una joya por descubrir y por algo la llaman la Ciudad Esmeralda. (Bueno, esto también puede ser por la abundancia de zonas verdes y bosques de la zona). Para que pueda demostrártelo, acompáñame durante todo un día para hacer turismo, ver peces voladores y tomar todo tipo de cafés.
Pioneer Square
Nuestro recorrido empieza en la Pioneer Square, el centro histórico de la ciudad. Aquí, en el lugar de nacimiento de Seattle, echaron raíces los primeros colonos en 1852. En el centro de la plaza hay una pérgola de hierro que se construyó en 1909 como parada de tranvías. Junto a ella, el tótem indio de la tribu tlingit recuerda a los visitantes la complicada relación entre los indígenas americanos y los americanos de origen europeo. Las calles que rodean la Pioneer Square son famosas por sus edificios de estilo renacentista, las numerosas galerías de arte, las boutiques vintage y las cafeterías. Si te gusta la historia, sumérgete en la de la ciudad en el museo Klondike Gold Rush, que está en esa zona, y averigua por qué la fiebre del oro en la década de 1890 atrajo a tantas personas y convirtió a Seattle en la metrópolis que es hoy en día.
Watterfall Garden Park
La próxima parada es el Waterfall Garden Park, una cascada artificial de 6,71 metros en el patio de la antigua sede de UPS. El parque es perfecto para relajarse y dejar que tu mente divague: si cierras tus ojos, los 23 000 litros de agua bombeados a través de la casaca te harán creer que no estás rodeado más que de naturaleza.
Columbia Tower
Si te apetece una vista panorámica de la Ciudad Esmeralda, vete al Sky View Observatory de la torre Columbia y admira la vista de 360 grados desde la planta 73. No te olvides de hacer unas cuantas fotos para presumir de que estuviste casi 300 metros por encima del suelo de Seattle y en el mirador público más alto del oeste del Misisipi. Para tomar esa cafeína que tanto necesitas –y seguir disfrutando de las vistas, por supuesto–, visita la cafetería de Starbucks de la planta 40. ¡Qué aproveche!
Gum Wall
Fotografía un #MomentoEF o dos cuando pases por la biblioteca pública de Seattle –una auténtica obra maestra arquitectónica– y la Seattle Great Wheel, la noria del muelle. No guardes todavía tu cámara, porque seguro que querrás enseñar a todo el mundo cuando vuelvas una de las atracciones turísticas más famosas de la ciudad, la Gum Wall. Es exactamente lo que se espera: una pared recubierta de miles de chicles usados. Es un poco asqueroso y, para ser sincera, no me atreví a pegar mi chicle entre todos esos chicles con saliva de otras personas. Pero todo eso forma parte de la experiencia y es la razón por la que el arte hecho con chicle se queda grabado en la memoria de la gente.
Pike Place Market
A solo unos pasos de la Gum Wall está el mercado de Pike Place, el mercado de productos agrícolas más antiguo de la ciudad. Desde 1907, este es el lugar para comprar productos frescos de granja: desde verduras, fruta y especias hasta pescado fresco. Es el sitio perfecto para comer algo mientras se observa a los pescaderos gritando los pedidos y lanzando el pescado antes de envolverlo para los clientes. Para hacer un poco de ejercicio después de comer, pasea por los innumerables puestos y tiendas del mercado, y vete a ver a Rachel, una cerda, mascota y hucha de bronce de 250 kilos que recauda dinero para la fundación del mercado.
El Starbucks Original
En teoría, ya hemos hecho una parada en Starbucks, pero la cafetería original de Starbucks que está cruzando el mercado Pike Place es una visita obligada. Aquí, en el n.º 1912 de Pike Place, es donde comenzó en 1971 la historia de la cadena de cafeterías más grande del mundo. El primer Starbucks conserva además gran parte de su diseño original (incluido el primer logo marrón), así que es prácticamente como un viaje en el tiempo a base de cafeína.
A través del post Alley hacia el Monorail
Bien hidratados y con el café en la mano, seguiremos nuestro camino a través del estrecho Post Alley, con todas sus pequeñas y bonitas tiendas, y continuaremos hacia Pine Street hasta que lleguemos al Westlake Center, donde subiremos al monorraíl. Un kilómetro y medio y dos minutos más tarde, el monorraíl –que se construyó para la Feria Mundial de 1962– es un transporte cómodo y divertido para ir desde el centro de Seattle al Seattle Center. Si quieres hacer algunas compras, no dejes de ir al Pacific Place, cruzando el Westlake Center: En estos 31 000 metros cuadrados puedes encontrar todo lo que tú puedas desear y tu cartera soportar.
Chihuly Garden and Glass
Cuando llegues al Seattle Center, ten lista tu cámara y visita la Chihuly Garden and Glass, justo al lado de la Space Needle. La exposición se inauguró en 2012 y muestra las coloridas y espectaculares esculturas de vidrio de Dale Chihuly. Hay ocho galerías, un jardín lleno de flores de vidrio y la pieza central de la exposición, la gran Glasshouse –de 12 metros de alto y 418 metros cuadrados–, decorada con una escultura de 30 metros que recuerda a una guirnalda de flores.
Si te va la cultura pop contemporánea, vete al museo EMP de arte moderno, justo enfrente del Chihuly Garden and Glass. El museo fue diseñado por Frank O. Gehry y en él hay todo tipo de cosas sobre la cultura pop; música, películas, literatura y videojuegos. Y también rarezas, como letras manuscritas, instrumentos y fotografías de Kurt Cobain y Jimi Hendrix, ambos de Seattle.
Space Needle
Empezamos el día con unas vistas impresionantes y terminaremos nuestro recorrido de Seattle con un hermoso paisaje, esta vez en la cima de la Space Needle –de 158 metros de altura–, uno de los enclaves más famosos de la ciudad. Si tienes suerte, podrás ver el Mount Rainier coronado de nieve, que es un volcán activo y la montaña más alta del estado de Washington. Verás el Lake Unión, los ferris de Elliott Bay y, si escoges bien la hora de tu visita, una espectacular puesta de sol digna de Instagram. #MomentoEF
Tilikum Place
Vamos a hacer que la última parada sea inspiradora. No muy lejos de la Space Needle, encontrarás el Tilikum Place, una pequeña pero importante plaza. En su centro hay una estatua de tamaño natural del jefe Seattle –jefe de las tribus Duwamish y Suquamish–, quien, según la leyenda, trabajó forjando relaciones con los colonos blancos y dio su nombre a la ciudad.